En la gala de entrega del Premio Nobel de la Paz, fue el galardonado quien no asistió. Tampoco acudió ninguno de sus familiares. El disidente chino Liu Xiaobo, encarcelado desde 2009, no pudo recoger ayer su premio porque el Gobierno de Pekín imposibilitó la presencia de quien considera un “criminal” y un “separatista” que pretende acabar con el Gobierno del país. Una silla vacía y una foto de Liu fueron lo que simbolizó al premiado en la gala celebrada en Oslo, capital de Noruega.
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| Imagen: elpaís.com |
Thorbjoern Jagland, presidente del comité noruego del Nobel, fue el encargado de colocar el diploma que acredita el galardón sobre la silla vacía en la que debería haberse sentado el disidente chino. La sala, con alrededor de 1.000 invitados, estalló en aplausos. Los reyes de Noruega, embajadores mundiales y un centenar de disidentes chinos exiliados formaron parte de la ovación. Durante la ceremonia, Jagland leyó un discurso que defendía la libertad de expresión como elemento unido a la democracia y la paz. Además, recordó que Liu Xiaobo fue premiado por “su larga y pacífica lucha por los derechos humanos fundamentales en China” y encontró en la ausencia del disidente la más simple demostración de “lo necesario y apropiado del premio”.
La actriz noruega Liv Ullman leyó en la gala una declaración de Liu Xiaobo en el tribunal en 2009 antes de ser encarcelado. Durante la celebración del acto, China puso todas las trabas posibles para que la entrega se convirtiese en noticia en todo el país. Los medios no ofrecían ni una sola referencia a la ceremonia y el acceso a la web de los Nobel fue restringido. Desde que se conociese que el premio era concedido a Xiaobo el pasado 8 de octubre, China enfureció por lo que consideraba una provocación y politización del galardón. Desde el 11 de octubre, tres días después del anuncio, la esposa del premiado, Liu Xia, permanece arrestada en su domicilio.
Por otro lado, tres horas después de la ceremonia del Nobel de la Paz, se celebraba en la capital sueca Estocolmo la entrega de los Nobel de Literatura y las disciplinas científicas. El rey Carlos Gustavo de Suecia fue el encargado de otorgar al escritor peruano Mario Vargas Llosa el Nobel de las letras, así como el Nobel de Física a los rusos Andre Geim y Konstantin Novoselov, y el de Química a los estadounidenses Richard F. Heck y los japoneses Ei-ichi Negishi y Akira Suzuki. Además, se entregó el Nobel de Medicina al también ausente por motivos de salud Robert G. Edwards y el Nobel de Ciencias Económicas a los norteamericanos Peter Diamond y Dale T. Mortensen y al chipriota Christopher Pissarides.
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